Es importante que no se someta a tratamientos con personal no profesional, que pueda repercutir de manera negativa en la lesión, complicando mucho más la lesión y prolongando la recuperación de la misma. Acuda siempre a un profesional, recuerde que la salud es siempre lo primero.
DORSALGIAS

Son todos los dolores que se manifiestan en la zona dorsal de la espalda. Podemos ubicar anatómicamente esta zona en la parte posterior de las costillas, detrás de los hombros y omóplatos, a la altura de la región torácica de la columna vertebral. Pueden ser causadas por múltiples factores.
Una de las más comunes es que pueden producirse por mantener malas posturas durante un período largo de tiempo sobre todo en sedestación, tos repetitiva, giros bruscos o por exposición al frío, pero además de esta también están:
POSIBLES CAUSAS:
El estrés continuado y la somatización emocional
Suelen ser un motivo de dorsalgia bastante frecuente, ya que, al tratarse de una musculatura lisa de carácter tónico y postural, está muy influenciada anatómica y fisiológicamente con el sistema autónomo vegetativo (simpático y parasimpático).
Deformidades existentes en la columna vertebral
Las personas con una tendencia cifótica, una escoliosis o con un dorso excesivamente plano pueden tener una mayor susceptibilidad a padecer dorsalgia si bien no es un factor desencadenante primordial.
Puntos gatillos miofasciales a nivel dorsal
Los puntos gatillos representan zonas de dolor localizadas e irradiadas a otras zonas. A nivel dorsal existen varios que son relevantes.
Las enfermedades autoinmunes
Como la espondilitis anquilosante o la artritis reumatoide atacan a la columna vertebral y por lo tanto pueden estar relacionadas con los casos de dorsalgia más severos que son fácilmente diagnosticados por el médico.
Hernias discales o procesos degenerativos discales
Si bien es la zona de la columna vertebral con menos predisposición a padecer estos problemas discales, también ocurren y pueden desencadenar o agravar un cuadro de dorsalgia.